Muy pocos entrenadores pueden presumir de tener en su currículum el haber dirigido a jugadores de primer nivel mundial como Gerard Piqué, Sergi Busquets y Jordi Alba, entre otros. Tampoco el haber estado durante ocho temporadas en el FC Barcelona, tanto en categorías inferiores como en el staff de la primera plantilla. Uno de los que sí puede hacerlo es el técnico de JV Sports Sergio Lobera, que sigue dando pasos importantes en su trayectoria. Ahora, después de éxitos en España, Marruecos e India, inicia una nueva etapa, sin salir del país asiático, en el Mumbai City. Con su nuevo club, propiedad de los dueños del Manchester City, buscará repetir los grandes resultados obtenidos con sus anteriores equipos. Este fin de semana arranca la Super League y nosotros charlamos con él en la previa.
Lo primero, ¿cómo está viviendo la situación actual de la Covid-19?
Como todo el mundo, no somos ajenos a lo que pasa a nuestro alrededor. Nos está condicionando tanto a nivel personal como profesional. Aquí estamos viviendo en una burbuja, con fuertes restricciones para mantener la seguridad dentro y fuera de la competición. Mi mujer y mi hija, que tiene dos años, llegaron hace siete días, pero no he podido estar con ellas todavía, tienen que pasar los 14 días de cuarentena que nos imponen. Son esfuerzos y sacrificios que todos tenemos que hacer. Ojalá pronto se pueda solventar y podamos regresar a la máxima normalidad posible.
El sábado inicia una nueva temporada, la primera con el Mumbay City. ¿Cómo la afronta?
Con mucha ilusión, es un reto importante para mí formar parte del City Football Group (CFG), algo positivo en mi carrera. Estoy encantado de trabajar con gente que posee un gran conocimiento del fútbol y que me da todas las herramientas que necesito en el día a día. Quiero conseguir algo importante con el Mumbai City, estoy muy ilusionado.
Otro reto más en su trayectoria, porque ha tenido unos cuantos…
Sí, es verdad. He estado ocho años en el FC Barcelona y uno de ellos en el staff del primer equipo, clasifiqué a la UD Las Palmas para dos playoffs de ascenso a Primera, he disputado la Champions africana y asiática. Ahora, después de tres años muy buenos en el FC Goa en los que conseguimos el primer título en la historia de la entidad, aumentamos la presencia de jugadores en la selección de India y la clasificación para Champions, iniciamos uno de los más destacados con el CFG y el Mumbay City. El listón está muy alto, pero queremos luchar por alcanzar grandes metas.
La presión siempre le acompañó porque se formó en el FC Barcelona…
Sí, fue una etapa inolvidable que me enriqueció a todos los niveles, en lo personal y en lo deportivo. Se recibe una educación futbolística inolvidable. Más que con los títulos, uno se queda con que ha aportado un granito de arena en el desarrollo de jugadores que hoy están en la élite del fútbol mundial como es el caso de Gerard Piqué, Sergio Busquets y Jordi Alba, entre otros. Eso te satisface, es bonito. No sólo importan los títulos.
¿Marca para siempre?
Sí, a nivel de educación futbolística, por la gente que has podido conocer después de tanto tiempo trabajando en el club. A nivel de currículum no todos pueden decir que han trabajado en un club de la magnitud del FC Barcelona. Y eso es algo que se valora muy positivamente en el mundo del fútbol.
En sus equipos, ¿intenta mantener lo aprendido en el FCB? ¿Es fácil trasladarlo a otros clubes y jugadores?
Yo creo en este tipo de fútbol, por eso busco siempre un club que me permite tener un perfil de jugador adecuado para llevarlo a cabo. Puedes transmitirlo cuando crees y yo lo hago. Pienso que hay que cuidar al espectador, al fútbol. La persona que ve un partido tiene que disfrutar durante los 90 minutos, no sólo cuando pita el colegiado el final del choque y has ganado. La gente se debe entretener y pasarlo bien. Por eso intento desarrollar una filosofía de ataque con equilibrio, porque si no existe equilibrio es difícil obtener resultados. Mi idea es la de llevar la iniciativa, recuperar cerca de la portería adversaria, no especular y ser valiente. Se asumen ciertos riesgos, pero es la idea en la que creo e intento transmitirla a mis jugadores.
En España alcanzó Segunda División, peleó por ascender con la UD Las Palmas y se marchó fuera teniendo opciones para seguir aquí. ¿Por qué tomó esa decisión?
Porque creía que era el momento oportuno para vivir nuevos retos y experiencias. Seguramente hay gente que no pueda entender que dejase el FCB para irme al Terrasa o abandonar España para irme a Marruecos teniendo ofertas y mercado. Siempre me he dejado llevar por lo que creía que necesitaba. Ir dónde mejor puedas trabajar y crecer, ahí debes estar. Estando en Marruecos tuve cuatro ofertas para regresar a Segunda División, pero consideré que no era el momento adecuado para hacerlo. No me arrepiento de las decisiones que he tomado, me han permitido seguir aprendiendo de experiencias diferentes a las que pude tener en España.
¿Cómo fue su etapa en Marruecos?
Con el Moghreb Tetouan viví muchas experiencias, fueron tres años en Primera División, Champions de África en la que visitamos numerosos países, derbis… Como entrenador te enriquece y más cuando si todo sale bien. Eliminamos al Al-Ahly egipcio, el club con más títulos del mundo, nos clasificamos para la fase final cuando nadie lo esperaba. Fue algo histórico, unos años fructíferos en los que logramos objetivos importantes.
Y después a India, al FC Goa…
Sí, conocía a jugadores y otros profesionales que estaban aquí y me habían hablado muy bien. Es una competición con muchos medios, gran organización y con muy buenos profesionales. La prueba es que futbolistas y entrenadores que todavía tienen mercado en España se vienen a India. Fue un cambio grande. Fue un reto sustituir a Zico en el banquillo y tras quedar el equipo último meternos durante tres años en la lucha por el título además de ganar la Supercopa. Una Liga en la que estuvieron Forlán, Del Piero, Pires, Anelka y Roberto Carlos me iba a aportar mucho y así ha sido. Por tanto, contento y orgulloso de ese cambio.
¿Cómo se vive el fútbol en estos países?
Cada uno tiene una cultura y unas costumbres diferentes y eso se transmite en el fútbol. En Marruecos se vive con mucha pasión, sientes la presión en los buenos y en los malos momentos. Vivimos derbis con Tánger increíbles. Aquí, en la India, el deporte principal es el cricket, el fútbol se sigue de una manera más tranquila, respetuosa. Al final aprendes de todas estas experiencias y mejoras como entrenador.
¿La exigencia es mayor por venir de fuera?
Cuando los clubes apuestan por traer buenos profesionales no lo hacen únicamente por obtener victorias, también por el legado que pueden dejar. Se busca mejorar el fútbol de la India y es una responsabilidad que tienes que asumir, al igual que la de lograr buenos resultados. Es algo que he aceptado desde el primer día.
¿Qué es lo que más le costó inculcar a los jugadores?
La verdad es que fue relativamente sencillo, porque para los futbolistas resulta atractiva nuestra propuesta futbolística. Pero es verdad que el proceso lleva un tiempo porque queremos jugar iniciando la jugada desde atrás, por ejemplo. Si de algo me siento orgulloso en mi trayectoria no es por los títulos que haya logrado, sí por cómo se han conseguido. Es muy importante para un entrenador ganarse el respeto de la gente. Pero no todo es jugar bonito, hay que hacerlo bien. Y nosotros jugamos bonito, bien y hemos conseguido títulos.
¿Y cuál es el objetivo en el Mumbai City?
Llego sabiendo que es el primer año pero que la exigencia de formar parte del CFG es muy alta. Acepto porque tengo los medios suficientes para pelear por todo. Ojalá podamos conseguir muchos éxitos en este club, su primer título de la historia. Sería maravilloso.
¿Qué le piden desde el CFG?
Desde el primer día hubo sintonía absoluta. Cuando me reuní con ellos en Manchester vimos que queríamos lo mismo, tenemos una manera de pensar futbolística idéntica. Más que exigencia piden trabajo, cuentan con un enorme grupo de profesionales que controla más diez franquicias por todo el mundo y es algo muy bonito. El objetivo es ganar, pero hacerlo de una forma atractiva, marcada desde el primer equipo del Manchester City de Pep Guardiola.
Y la competición española, ¿la sigue?
Sí, en directo o grabo partidos. Me focalizo mucho más en Segunda División, conozco a todos los equipos y el mercado actual. Siempre hay que estar preparado para conocer todo tipo de competiciones. Además, es una liga en la que he estado dos años y me gusta, es muy atractiva.
Para terminar, todas estas experiencias le han hecho crecer…
Me han aportado mucho a nivel personal y profesional. En el aspecto familiar es impresionante. Como entrenador, adaptarte a tantas cosas enriquece mucho más. No te encasillas en un país, competición o perfil de futbolista. He crecido mucho en estos años fuera de España.